CRISPR, Malaria

CRISPR Detiene la Malaria: Edición Genética Bloquea Transmisión por Mosquitos

Tecnología

¡La tecnología CRISPR es realmente asombrosa! Hemos visto cómo puede potencialmente tratar e incluso curar enfermedades, pero ahora, los científicos están explorando cómo puede realmente prevenirlas en primer lugar. Recientemente leí sobre un estudio fascinante publicado en Nature donde los investigadores lograron ajustar un solo gen en mosquitos, haciéndolos incapaces de transmitir la malaria. Eso es un gran avance, considerando que la malaria es responsable de alrededor de 600,000 muertes cada año.

La malaria es un problema difícil de resolver. Alrededor de 263 millones de personas se infectan cada año, y los esfuerzos para controlar las poblaciones de mosquitos se han estancado. El problema es que tanto los mosquitos como los parásitos que transmiten la malaria se han vuelto resistentes a los insecticidas y medicamentos habituales. Entonces, ¿cuál es la solución? Pues bien, biólogos de algunas de las mejores universidades han creado una idea inteligente: cambiar un solo aminoácido en mosquitos para bloquear la transmisión de la malaria.

Estos mosquitos modificados aún pueden picar a personas con malaria y recoger los parásitos, pero no pueden transmitir esos parásitos a nadie más. Es como si se convirtieran en callejones sin salida para la enfermedad. La magia ocurre con las "tijeras" CRISPR-Cas9, que se utilizan para cortar el aminoácido problemático (llamado L224) y reemplazarlo con una versión inofensiva (Q224).

El alelo L224 ayuda a los parásitos a viajar a las glándulas salivales del mosquito, donde pueden infectar a una persona cuando el mosquito pica. El nuevo aminoácido Q224, sin embargo, impide que los parásitos lleguen a esas glándulas, deteniendo efectivamente la infección. Como dijo uno de los investigadores, George Dimopoulos, han convertido un gen de mosquito en un "escudo poderoso" contra la malaria. ¡Parece que este escudo funciona para diferentes especies de parásitos de la malaria!

Lo realmente genial es que, a diferencia de los métodos anteriores, este cambio genético no afecta la salud ni la capacidad de reproducción de los mosquitos. Es un ajuste sutil con un gran impacto. Los investigadores también han desarrollado una forma para que la descendencia del mosquito herede el alelo Q224, de modo que pueda propagarse por la población de mosquitos e impedir la transmisión de la malaria.

Es un enfoque excelente, porque, como dijo Dimopoulos, están aprovechando las propias herramientas genéticas de la naturaleza para convertir a los mosquitos en aliados contra la malaria. Es ingenioso, porque a veces las mejores soluciones son aquellas que funcionan con la naturaleza, no contra ella.

Fuente: Engadget