Chatbots de IA: ¿Los Nuevos Persuasores Políticos?

Escucha esto: un estudio reciente sugiere que los chatbots de IA podrían ser la próxima gran novedad en las campañas políticas. Sí, has oído bien. Estos tipos digitales podrían estar por ahí, charlando, intentando influir en los votantes.

Investigadores, liderados por David G. Rand en Cornell, decidieron ver si estos bots realmente podían influir en las opiniones de las personas. Realizaron experimentos donde las personas se emparejaban con chatbots diseñados para defender a candidatos específicos en diferentes elecciones: la carrera presidencial de EE. UU. en 2024 y algunas elecciones en Canadá y Polonia.

Lo que descubrieron fue bastante interesante. Si bien los chatbots tuvieron cierto éxito en fortalecer el apoyo a los candidatos que a la gente ya les gustaban, fueron aún más efectivos para persuadir a aquellos que inicialmente estaban en contra de ellos. Quiero decir, eso es algo importante, ¿no? Imagina un mundo donde las campañas políticas son libradas por ejércitos de chatbots persuasivos.

En el experimento de EE. UU., lograron que más de 2300 estadounidenses dijeran si votarían por Trump o Harris, luego los emparejaron con un bot que defendía a uno de esos candidatos. Cosas similares sucedieron en Canadá y Polonia, con bots que apoyaban a diferentes líderes políticos.

Las Tácticas de Persuasión

Los bots tenían una misión clara: aumentar el apoyo al candidato asignado y hacer que los partidarios votaran o desanimar a los opositores. Se les dijo que fueran "positivos, respetuosos y basados en hechos", que usaran buenos argumentos e historias, que abordaran las preocupaciones y que iniciaran conversaciones con suavidad. Al final, el objetivo era influir en quién vota la gente.

Cuando los investigadores investigaron por qué algunos votantes eran más receptivos que otros, notaron que los chatbots que presentaban argumentos basados en hechos y evidencia o aquellos que tenían conversaciones sobre política eran más persuasivos. Aparentemente, la gente ve a estos bots como si tuvieran algún tipo de autoridad en el asunto. ¿La trampa? La información que proporcionaban los chatbots no siempre era precisa. Ah, vamos, ¡estamos hablando de política aquí!

En los experimentos, la gente sabía que estaba hablando con chatbots que intentaban persuadirlos. Pero en el mundo real, ¿quién sabe qué está pasando entre bastidores? Mira a Grok, el chatbot de Elon Musk, está bastante claro que este bot tiene cierto sesgo.

Verás, los grandes modelos de lenguaje son como cajas negras. Es difícil saber exactamente qué información entra y cómo afecta a los resultados. Siendo realistas, nada impide que una empresa con objetivos políticos le diga a su chatbot que promueva esos objetivos. A principios de este año, un estudio demostró que los LLM como ChatGPT se desplazaron hacia la derecha después de la elección de Trump. Saca tus propias conclusiones, pero vale la pena recordar que los chatbots no son políticamente neutrales.